MuMaLá alerta sobre la persistente vulnerabilidad de mujeres y niñas frente a la ausencia de políticas públicas efectivas.
En los primeros diez meses del año, al menos 211 mujeres fueron asesinadas en Argentina por razones de género, según el Observatorio Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLá). Además, se registraron 855 intentos de femicidio, mientras que 142 niños y niñas quedaron huérfanos tras el asesinato de sus madres. Octubre fue el mes con 29 víctimas fatales.
El informe indica que la mayor parte de los femicidios —el 69%— fueron cometidos por parejas, ex parejas o familiares, y que el 65% ocurrieron dentro de los domicilios de las víctimas. También se advierte un aumento de casos vinculados al crimen organizado y al narcotráfico, junto con un recrudecimiento de la violencia en la forma de ocultar los cuerpos y cometer torturas previas.
MuMaLá señala que la proliferación del uso de armas de fuego está asociada a la reciente flexibilización de la normativa sobre tenencia de armas, que eliminó la Agencia de Control de Armas y suspendió programas de entrega voluntaria. Aunque disminuyó la participación de agentes de seguridad, creció un 10% el uso de armas reglamentarias en femicidios.
La organización alerta que solo el 14% de las víctimas había denunciado a sus agresores, y que entre ellas apenas el 28% contaba con botón antipánico. Para MuMaLá, estos datos reflejan la caída de las políticas públicas de prevención y protección y el silencio oficial ante la violencia de género.
Victoria Aguirre, vocera de la organización, subrayó la urgencia de declarar la Emergencia en Violencias de Género y de reinstaurar programas de atención integral, acompañamiento y capacitación, para revertir la escalada de asesinatos y proteger a mujeres, niñas y LGBTIQ+.