Desde Boedo, el dirigente del Frente de Izquierda-Unidad cuestionó la política exterior de Milei y denunció una entrega de soberanía frente a Estados Unidos.

Gabriel Solano, legislador porteño y primer candidato a diputado nacional por la Ciudad de Buenos Aires junto a Myriam Bregman, encabezó este sábado una recorrida por el barrio de Boedo. Allí denunció la existencia de un acuerdo secreto entre el presidente Javier Milei, el expresidente Donald Trump y el secretario del Tesoro norteamericano Scott Bessent. Según el referente del Frente de Izquierda-Unidad (FIT-U), ese entendimiento “implica la mayor renuncia a la soberanía nacional en la historia argentina” y “somete al país a las decisiones del poder financiero estadounidense”.

Solano afirmó que la gravedad del hecho radica en que la información fue difundida por funcionarios de Estados Unidos y no por el gobierno argentino. “El pueblo se entera de un acuerdo que compromete el futuro del país por boca de extranjeros, mientras el gabinete guarda silencio. Es una afrenta al Congreso y a la Nación”, señaló ante vecinos y militantes.

El dirigente advirtió que, de concretarse los términos difundidos por autoridades norteamericanas, el acuerdo permitiría a Washington intervenir directamente en la política cambiaria argentina. “Estados Unidos tendría capacidad para condicionar el valor de nuestra moneda y provocar una desestabilización económica si no se cumplen sus exigencias”, explicó.

Solano agregó que los compromisos incluirían “la entrega de las tierras raras, del uranio y del litio” y un “distanciamiento con China, nuestro principal socio comercial”. Para el legislador, estas decisiones “no cuentan con mandato popular ni con autorización del Congreso”, y revelan “una política de entrega sin precedentes desde la dictadura”.

“El gobierno de Milei pretende gobernar como si la soberanía fuera una mercancía que se negocia a cambio de dólares. Si insiste en este rumbo, la defensa de la Nación exigirá respuestas políticas de fondo”, sostuvo Solano, al tiempo que llamó a votar al Frente de Izquierda-Unidad como “la única fuerza que enfrenta de manera consecuente el sometimiento al imperialismo yanqui”.