La realidad virtual, aumentada y mixta están transformando la forma en que planificamos, vivimos y recordamos nuestras experiencias de viaje. Desde recorridos inmersivos hasta personalización extrema, las marcas tienen la oportunidad de conectar con los viajeros como nunca antes.
La industria de los viajes está experimentando una revolución sin precedentes gracias a las tecnologías inmersivas. La realidad extendida (XR, por sus siglas en inglés) está cambiando no solo cómo descubrimos destinos, sino también cómo los experimentamos. Ya no se trata solo de ver fotos o leer reseñas; ahora, los viajeros pueden sumergirse en recorridos virtuales en 360 grados, explorar ciudades en 3D y hasta "probar" un hotel o una playa antes de reservar. Este avance tecnológico no solo está transformando la planificación de viajes, sino que también está abriendo nuevas oportunidades para las marcas que buscan conectar con sus clientes de manera más profunda y personalizada.
La experiencia de viaje comienza mucho antes de subir a un avión. Con herramientas como Google Earth y dispositivos XR de Samsung, los viajeros pueden explorar destinos de manera inmersiva desde la comodidad de sus hogares. Imagina poder caminar virtualmente por las calles de París, recorrer un resort en las Maldivas o admirar la vista desde una terraza en Bali, todo antes de tomar una decisión. Esta capacidad de "probar antes de comprar" no solo reduce la incertidumbre, sino que también permite a los viajeros tomar decisiones más informadas y emocionalmente conectadas con sus destinos.
La realidad aumentada (AR) está llevando esta experiencia un paso más allá. Con dispositivos como el Apple Vision Pro, los usuarios pueden disfrutar de videos en 3D que los transportan a lugares lejanos como si realmente estuvieran allí. Esta tecnología no solo es útil para la planificación, sino que también está transformando la forma en que recordamos nuestros viajes. En lugar de limitarse a fotos y videos en 2D, los viajeros pueden revivir sus experiencias en un formato inmersivo, casi como si estuvieran de vuelta en ese lugar especial.
La personalización es otro de los pilares de esta revolución tecnológica. Las plataformas de AR no solo ayudan a planificar viajes, sino que también ofrecen sugerencias adaptadas a los intereses de cada usuario. ¿Quieres aprender un nuevo idioma antes de tu viaje? Hay aplicaciones de AR que te permiten practicar. ¿Te interesa conocer las costumbres locales? Existen guías interactivas que te brindan toda la información que necesitas. Además, la realidad aumentada está haciendo que los viajes sean más inclusivos. Un ejemplo destacado es la alianza entre Hilton y Be My Eyes, que utiliza IA y AR para asistir a personas con discapacidad visual durante su estancia en hoteles, ofreciendo una experiencia más accesible y sin barreras.
Para las marcas, este es un momento crucial. Ya no basta con ser una agencia de viajes en línea o una cadena hotelera; ahora es necesario construir experiencias que conecten emocionalmente con los viajeros. Los sitios web y las aplicaciones deben evolucionar para convertirse en plataformas integradas y personalizadas, donde cada punto de contacto sea una experiencia significativa. Las marcas que logren adaptarse a estos cambios y adoptar tecnologías inmersivas serán las que lideren la industria en los próximos años.
El futuro del turismo está más cerca de lo que pensamos. La realidad extendida no solo está transformando la forma en que planificamos y vivimos nuestros viajes, sino que también está redefiniendo cómo los recordamos. Si todo sigue como se proyecta, 2025 podría ser recordado como el año en que los viajes dejaron de ser solo un destino físico y se convirtieron en una experiencia digital completa. Para los viajeros, esto significa más opciones, más personalización y más inclusión. Para las marcas, es una oportunidad única para innovar y conectar con sus clientes de maneras nunca antes imaginadas.