El aumento del costo de vida llegó al 2,1% en junio, impulsado por los servicios financieros, la vivienda y el transporte. El semestre cerró con una suba del 15,3%.

La Ciudad de Buenos Aires registró en junio una inflación de 2,1%, cifra que supera el 1,6% de mayo y confirma la tendencia de aceleración del índice de precios. Así lo informó el Instituto de Estadística porteño, cuyos datos anticipan un contexto complejo para la inflación nacional, cuyos números se conocerán el próximo 14 de julio.

El incremento mensual estuvo liderado por los servicios financieros, que treparon un 3,5%, y por la vivienda, con un aumento del 3,1% debido a los ajustes en servicios públicos y alquileres. El transporte también subió un 3,1%, impulsado principalmente por el incremento en el boleto de colectivo urbano y por alzas en combustibles y pasajes aéreos.

El sector alimentos mostró una suba moderada del 1,6%, con subas en carnes, panificados y lácteos, mientras que verduras y legumbres bajaron, amortiguando la presión sobre el rubro. Otros sectores como salud y educación registraron aumentos cercanos al 2,6%, relacionados con las actualizaciones en cuotas de medicina prepaga y colegios privados.

Las bebidas alcohólicas y el tabaco junto con recreación y cultura subieron 2,9%, en tanto que la indumentaria mostró una estabilidad relativa con un leve aumento del 0,3%. En el semestre, el costo de vida acumuló un alza del 15,3%, y en comparación con junio del año pasado, la suba llega al 44,5%.

Los precios regulados y estacionales también contribuyeron al panorama inflacionario, con incrementos del 2,4% y 1,2% respectivamente. En un escenario de ajuste constante, los hogares porteños enfrentan un impacto creciente en su capacidad de consumo, con sectores clave que presionan hacia arriba el costo mensual.