Con apoyo multisectorial y una movilización prevista para el 25 de junio, gremios del transporte, estatales y organizaciones sociales conformaron un nuevo espacio de lucha contra la desregulación y el desmantelamiento del Estado.
En una reunión clave realizada en la sede de la Federación de Sindicatos Portuarios y Navales (FeMPINRA), dirigentes de diversos sectores sindicales y sociales acordaron la conformación del “Frente de Lucha por la Soberanía, el Trabajo Digno y los Salarios Justos”. El espacio debutará con una movilización el próximo 25 de junio frente al Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, encabezado por Federico Sturzenegger, uno de los ideólogos del plan de ajuste del gobierno de Javier Milei.
La convocatoria surge como respuesta al proceso de desregulación impulsado desde el Poder Ejecutivo, que incluye los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU), el recorte de la inversión pública y las restricciones a la negociación paritaria. “Nos enfrentamos a un modelo que excluye a los trabajadores y desmantela el Estado”, señalaron los convocantes en un comunicado conjunto.
El nuevo frente cuenta con el respaldo de sectores estratégicos como la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), la FeMPINRA, el sindicato La Fraternidad, ATE Provincia de Buenos Aires (ATE-PBA), la CTA Capital, la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA), la Asociación del Personal del INTA (APINTA), y gremios de las telecomunicaciones, medios y la industria, como AATRAC, FATIDA, FOETRA y la UOM.
Desde la multisectorial advierten que el plan de Milei no solo impacta en la macroeconomía, sino que ya se traduce en pérdida de poder adquisitivo, paralización de obras, despidos y deterioro generalizado de las condiciones laborales. En ese contexto, la protesta del 25 de junio se perfila como el primer paso de una agenda de movilización que podría extenderse si el Gobierno no modifica el rumbo.
“La respuesta va a ser en la calle y en unidad”, anticiparon los organizadores, que ya trabajan en una declaración conjunta para sumar nuevas adhesiones y visibilizar el rechazo a un modelo que, denuncian, “destruye el empleo, entrega la soberanía y castiga a los sectores populares”.