Una pieza generada con inteligencia artificial y difundida por cuentas ligadas al oficialismo buscó confundir al electorado porteño. Macri respondió con dureza y acusó a La Libertad Avanza de fraude digital.

A pocas horas de los comicios legislativos en la Ciudad de Buenos Aires, la veda electoral fue violentada por una operación sucia que expuso los límites éticos y legales del oficialismo libertario. Una secuencia audiovisual falsa, generada con inteligencia artificial, fue difundida masivamente en redes sociales con el objetivo de manipular el voto capitalino. El video, que simula una declaración del expresidente Mauricio Macri, sugiere que el fundador del PRO baja la candidatura de Silvia Lospennato y pide votar al vocero presidencial Manuel Adorni.

La maniobra digital, que rápidamente se viralizó en cuentas como @TommyShelby_30, @ElTrumpista, @jdoedoe101101 y @MileiEmperador —todos perfiles habituales en la difusión de contenido apócrifo a favor del oficialismo—, representa un salto cualitativo en el uso político de la tecnología para la desinformación. La grabación manipulada incluye un deepfake creíble del exmandatario, con una puesta en escena que imita gestos, tonos y discurso, cerrando con una frase atribuida a Macri: “Frenemos al kirchnerismo, votando a Manuel Adorni”.

Entre quienes contribuyeron a amplificar la operación figura el militante libertario Daniel “Gordo Dan” Parisini, operador digital del entorno presidencial, cuya militancia online lo ha convertido en una pieza clave de la maquinaria propagandística del Gobierno. La acción fue difundida en plena prohibición de actos proselitistas, desafiando la legislación electoral vigente.

La respuesta del expresidente no tardó. A través de sus redes, Macri calificó el video como un “intento de fraude electoral” y responsabilizó directamente al oficialismo nacional. “Se trata de un burdo montaje con inteligencia artificial, difundido por personas del círculo íntimo de La Libertad Avanza”, denunció. Y agregó: “Es un ataque grave a la democracia y al derecho de los ciudadanos a votar libremente, sin engaños ni manipulaciones”.

La Justicia Electoral aún no se ha pronunciado sobre el hecho, pero el episodio ya genera preocupación por el precedente que sienta en el uso de tecnologías como el deepfake en campañas políticas. En un contexto marcado por la polarización y el descrédito institucional, las elecciones porteñas quedaron atravesadas por una nueva forma de agresión política: el fraude digital planificado y ejecutado desde cuentas cercanas al oficialismo.

La gravedad del episodio no radica solo en la falsedad del contenido, sino en su intencionalidad política. En lugar de propuestas, La Libertad Avanza apuesta a la confusión. En lugar de democracia, a la manipulación.