La Policía Federal demoró a siete jóvenes militantes radicales por realizar una protesta simbólica contra el ajuste. El operativo coincidió con un acto de Milei en Belgrano. La UCR y la candidata Lula Levy denunciaron persecución política.
A plena luz del día y en plena democracia, siete militantes de la Unión Cívica Radical fueron detenidos este viernes por la Unidad de Investigación Antiterrorista de la Policía Federal. El “delito”: circular con una camioneta que parodiaba la intolerancia del presidente Milei con un mensaje simbólico, en defensa de los jubilados y contra el ajuste salvaje. El operativo, que incluyó la retención de documentos, requisas e intimidaciones, tuvo lugar a pocas cuadras de donde el presidente encabezaba un acto de campaña junto a Manuel Adorni.
Los jóvenes, de entre 20 y 27 años, estaban en el barrio de Belgrano con un altoparlante que difundía un audio con toses y la frase: “A Milei le molesta la tos, a nosotros el ajuste salvaje”. La acción formaba parte de una campaña de apoyo a Lula Levy, candidata a legisladora porteña. “Era una actividad pacífica, simbólica, que no interfería en el acto oficialista”, explicó una de las detenidas en C5N. Aun así, fueron demorados por tres horas.
La respuesta institucional no se hizo esperar. La UCR emitió un comunicado exigiendo explicaciones a la ministra Patricia Bullrich y advirtió sobre el atropello a los derechos democráticos. Lula Levy, por su parte, denunció en redes que el operativo fue “un mensaje de intimidación en vísperas de una elección clave para el gobierno”.
La escena resulta tan grotesca como grave. Un gobierno que asegura defender la libertad, pero reprime un mensaje con ironía. Una policía que detiene jóvenes por ejercer su derecho a la protesta pacífica. Y un aparato estatal que actúa con rapidez solo cuando se trata de blindar al poder.
La criminalización del disenso se vuelve rutina. Esta vez les tocó a militantes de la UCR, pero el mensaje es para todos. El autoritarismo avanza con formas cada vez más burdas. Y la democracia, esa que costó tanto recuperar, vuelve a estar en riesgo.