Macarena Rodríguez, tiktokera libertaria y actual coordinadora de redes del Gobierno, integró la comitiva oficial que viajó a Roma. El Gobierno evita explicar su presencia y crece la polémica por el uso de fondos públicos.

Una imagen vale más que mil desmentidas. En una fotografía tomada este domingo por la mañana en el Aeroparque Jorge Newbery, tras el regreso del presidente Javier Milei desde Roma, aparece una figura que el oficialismo había intentado mantener fuera del foco: Macarena Jimena Rodríguez, tiktokera libertaria y actual Coordinadora de Contenidos de Activos Digitales de la Presidencia. La imagen confirma su presencia en el vuelo oficial al Vaticano, pese a que el vocero presidencial Manuel Adorni había negado públicamente tener una community manager.

El viaje, que tuvo como objetivo participar del funeral del papa Francisco, fue una ceremonia de alto perfil diplomático y estrictamente protocolar. En ese marco, la presencia de una funcionaria dedicada a redes sociales, con un fuerte sesgo ideológico y sin atribuciones diplomáticas, desató críticas que aún no fueron respondidas con claridad.

Rodríguez fue designada el 1° de febrero bajo el régimen SINEP, con categoría B y función ejecutiva IV, por 180 días hábiles. Antes de su desembarco en el Gobierno, se destacaba por su militancia digital libertaria, con presencia activa en TikTok, donde producía contenidos en defensa del presidente y en ataque a sus opositores. Su nombramiento formalizó el rol que desde las sombras venía ejerciendo como parte del dispositivo digital mileísta.

La polémica no se limita a su aparición en una comitiva presidencial. Tras la viralización de la fotografía, Adorni se limitó a twittear: "Fake: nunca tuve CM. Fin". No mencionó a Rodríguez ni explicó su rol en el viaje, ni los gastos asociados. Según pudo saber Noticias Argentinas, los costos del traslado habrían sido cubiertos con fondos públicos, lo que reavivó cuestionamientos por el uso discrecional del presupuesto estatal, en un contexto de ajuste y recortes generalizados.

Además, en redes circularon videos de Rodríguez en actos de campaña, lo que agrava la sospecha de que se estarían utilizando recursos públicos para actividades proselitistas en la Ciudad de Buenos Aires, donde dentro de tres semanas se celebrarán elecciones legislativas.

La imagen de la funcionaria digital descendiendo del avión presidencial terminó de exponer una trama de silencios y contradicciones. Y confirma algo más profundo: en el gobierno de Milei, la estrategia de redes no solo tiene rango ministerial. También, pasaporte diplomático.