Mientras crecen las versiones sobre un ciberataque, ni Bruselas ni los gobiernos ibéricos tienen una explicación oficial sobre la caída masiva del suministro eléctrico.

Las causas del masivo apagón que afectó a España, Portugal y parte del sur de Francia siguen siendo un misterio. Aunque no se descarta un ciberataque, los gobiernos involucrados y la Comisión Europea afirmaron que, hasta el momento, no hay evidencia concluyente que confirme esa hipótesis.

"Estamos trabajando para encontrar la causa y restaurar el suministro de electricidad", explicó António Costa, presidente del Consejo Europeo, que descartó —al menos por ahora— indicios de un ataque. La crisis energética obligó al presidente español Pedro Sánchez a convocar al Consejo de Seguridad Nacional, mientras en Portugal el primer ministro Luís Montenegro confirmó que “todo apunta” a que el origen estuvo en territorio español.

Desde Bruselas, la vicepresidenta de la Comisión para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, y el comisario de Energía, Wopke Hoekstra, convocaron una reunión urgente. La Red Europea de Gestores de Transporte de Electricidad (ENTSO-E) colabora con las operadoras ibéricas y francesas.

Por su parte, Ursula von der Leyen informó que habló con Sánchez y le ofreció el “apoyo total” de la Comisión. La prioridad es restablecer el servicio y determinar si se trató de una falla técnica, un sabotaje o un ciberataque.