Nos acompañan desde Siempre
client-img
client-img
client-img
client-img
client-img
client-img
client-img
client-img

Nota Completa

DENUNCIAN EL VACÍO EN CASA DE MONEDA

Publicado : 22/04/2025
(Review)

Radio abierta, pasaportes en riesgo y la sombra de un negocio inmobiliario

Trabajadores y trabajadoras de la Casa de Moneda realizaron este martes una radio abierta frente a la sede del organismo para denunciar el vaciamiento sistemático de la empresa pública líder en impresión de seguridad. El cierre de la planta de Don Torcuato, el desguace del jardín maternal y la exclusión de licitaciones marcan el retroceso de una institución clave para la soberanía tecnológica y documental del país.

La gravedad del caso quedó expuesta por el secretario adjunto de la Junta Interna, Sebastián Bravo, quien apuntó contra el gobierno nacional y denunció maniobras privatizadoras encubiertas: “¿No será que su idea era cerrar el Banco Central y destruir Casa de Moneda para que triunfe su estafa?”, se preguntó.

La protesta también advirtió sobre el futuro de productos de alta seguridad, como los pasaportes. Por primera vez en la historia, la empresa no fue convocada para imprimir moneda nacional. Las licitaciones privadas fueron satisfechas con proveedores del exterior, mientras que la renovación tecnológica de la planta fue paralizada.

“Todavía no se ha tomado conciencia del significado que tiene este tipo de documentos. Emitir el pasaporte argentino no debe ser objeto del lucro o beneficio de terceros. Es un servicio público imprescriptible que debe garantizar el Estado”, afirmaron.

Durante la actividad, también se cuestionó la campaña mediática que responsabiliza a la empresa por la falta de chapas patentes. Bravo desmintió las versiones y apuntó contra el Ministerio de Justicia: “Las chapas están siendo distribuidas de manera discrecional para generar malestar social y reforzar la idea de un Estado ineficiente. Es una profecía autocumplida al servicio del negocio privado”.

La denuncia incluyó una acusación concreta: detrás del vaciamiento estaría un negocio inmobiliario. “Quieren vender la tierra para hacer otro Quartier o entregársela a sus amigos. Lo mismo con la maquinaria: se la quieren regalar a los grupos que bancaron la campaña del gobierno”, disparó Bravo.

El testimonio de los trabajadores dibuja un escenario alarmante: despidos, retiros voluntarios forzados, pérdida de funciones clave y riesgo directo sobre la soberanía documental. Frente a ese panorama, el mensaje fue claro: Casa de Moneda no se vende. Se defiende.