La embajada china en Buenos Aires rechazó las acusaciones de “trampas de deuda” realizadas por el secretario del Tesoro de EE.UU. y denunció una campaña de difamación contra sus vínculos con América Latina.
La embajada de China en Argentina publicó un duro comunicado este lunes 14 de abril en respuesta a las declaraciones del secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, quien durante su visita a Buenos Aires había calificado como “acuerdos rapaces” y “trampas de deuda” los vínculos económicos del gigante asiático con países de América Latina.
El documento de la representación diplomática china calificó esas expresiones como “maliciosas difamaciones y calumnias”, y defendió la legitimidad de la cooperación entre China y Argentina, basada –según el texto– en el respeto mutuo, la igualdad y el beneficio compartido, “sin imponer condicionamientos políticos”.
“La parte estadounidense debería desintoxicar su mente, dejar de sembrar discordias y hacer más contribuciones reales al desarrollo de los países de la región”, sostuvo la embajada a través de su cuenta oficial en la red X.
En el comunicado, se acusa a Estados Unidos de “obstruir deliberadamente” la asistencia a los países del Sur Global, anteponiendo sus propios intereses geopolíticos al bienestar de los pueblos. También se denuncian las políticas arancelarias de la administración Trump como expresiones de “unilateralismo, proteccionismo y bullying económico”.
El pronunciamiento se enmarca en una creciente tensión geopolítica en la región, donde Estados Unidos busca recuperar influencia frente al avance estratégico de China en áreas clave como infraestructura, comercio, energía y tecnología. Argentina ha sido un actor central en esa disputa: forma parte de la Iniciativa de la Franja y la Ruta impulsada por Beijing y mantiene con China acuerdos financieros, comerciales y de inversión que el gobierno de Javier Milei ha puesto en revisión.
La embajada concluye su mensaje reafirmando el compromiso de China con el multilateralismo y el sistema internacional centrado en la ONU y la OMC. “China va a trabajar con los países de todo el mundo para defender los principios de consulta entre todos, aporte de todos y beneficios para todos”, subraya el texto.
Frente al alineamiento incondicional de Milei con Washington, y en un escenario de realineamientos globales, el respaldo o el conflicto con potencias como China dejan de ser una discusión abstracta. Se trata de intereses concretos, recursos estratégicos y soberanía económica. Y una vez más, Argentina está en el centro del tablero.