Más de 30 jueces de CABA repudiaron la denuncia presentada por la ministra de Seguridad contra el magistrado que ordenó limitar el accionar de las fuerzas federales. Rechazo al intento de condicionar al Poder Judicial.
Más de treinta magistrados del Poder Judicial de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires rechazaron públicamente la denuncia presentada por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, contra el juez Roberto Gallardo por “mal desempeño”. La iniciativa del Ejecutivo generó una fuerte reacción dentro del sistema judicial porteño, que advierte sobre un intento de disciplinamiento y condicionamiento a la justicia local.
El conflicto se originó luego de que Gallardo dictara una medida cautelar que ordenó a la Policía de la Ciudad custodiar la marcha de los jubilados, impidiendo el despliegue de las fuerzas federales. En respuesta, Bullrich presentó una denuncia ante el Consejo de la Magistratura, lo que fue interpretado por los jueces como una intromisión directa del Gobierno nacional sobre la autonomía porteña y la independencia judicial.
Los jueces enviaron una carta a la presidenta del Consejo de la Magistratura de CABA, Karina Leguizamón, en la que manifestaron su “profunda preocupación” por lo que consideran “una práctica creciente del Poder Ejecutivo de influir en decisiones jurisdiccionales mediante presiones políticas”.
En el texto, recordaron que las sentencias deben ser evaluadas exclusivamente por los canales procesales correspondientes y repudiaron la actitud del Ejecutivo al intentar juzgar públicamente los fallos judiciales. También reclamaron un “rechazo urgente” a la denuncia presentada por Bullrich, en línea con lo solicitado por organizaciones como la Asociación Latinoamericana de Jueces del Trabajo (ALJT) y el Capítulo argentino del Comité Panamericano de Juezas y Jueces por los Derechos Sociales y la Doctrina Franciscana (COPAJU).
Desde la oposición, la CGT respaldó al juez Gallardo y advirtió que el fallo garantiza el derecho constitucional a la protesta: “El paro es de los trabajadores”, aseguraron en conferencia de prensa. En el Gobierno, por el contrario, insisten en acusar a Gallardo de actuar con parcialidad política.