La legisladora porteña cuestionó la decisión del Gobierno de la Ciudad y reclamó una modernización integral del sistema de transporte para potenciar el desarrollo urbano en los barrios más postergados.
La diputada porteña Claudia Neira denunció que el plan del Gobierno de la Ciudad de reemplazar el Premetro por el sistema Trambus destruye inversión en infraestructura en lugar de modernizarla y frena una política de transporte orientada al desarrollo en el Sur de Buenos Aires. La legisladora afirmó que el Premetro constituye una pieza estratégica para la movilidad sustentable y equitativa en barrios históricamente relegados como Lugano Soldati y Riachuelo que dependen de esta conexión con la Línea E de subte.
Neira destacó que el sistema transporta diariamente a población trabajadora y estudiantil y sostenerlo y mejorarlo es garantizar su movilidad y favorecer un modelo de Ciudad más igualitario e inclusivo. En un hilo publicado en su cuenta de Twitter la diputada señaló que desmantelar el Premetro es retroceder en la posibilidad de un Sur más integrado y competitivo que necesita recuperar la inversión en transporte tradicionalmente concentrada en el Norte y Centro de la Ciudad.
La legisladora comparó la situación con ciudades como Barcelona París o Frankfurt que fortalecieron sus redes de tranvías light rail y corredores guiados como modos que mejor combinan cercanía accesibilidad e integración urbana para equilibrar su desarrollo. Los Trambus nunca van a producir el mismo impacto urbano social y territorial aseguró Neira y planteó en cambio un plan de modernización que incluya la actualización de estaciones la agilización del recorrido la ampliación del alcance del servicio y la renovación de los vehículos.
El reclamo de Neira se enmarca en un debate más amplio sobre el modelo de movilidad y desarrollo urbano en la Ciudad de Buenos Aires donde proyectos de infraestructura han sido cuestionados por priorizar obras en zonas centrales en detrimento de la periferia sur. La diputada insistió en que no se debe perder la oportunidad de orientar y modernizar una buena política de transporte urbano como han hecho las grandes ciudades del mundo convirtiendo al Premetro en un servicio ágil previsible y moderno que integre más sectores del sur al desarrollo de la Ciudad.