Los nuevos diputados del Partido Obrero en el Frente de Izquierda Unidad asumieron con un discurso de combate, fijando posición frente a las reformas estructurales del Gobierno, denunciando el “genocidio sionista” y reafirmando su alineamiento con la causa palestina y un “mundo socialista”.

Romina Del Plá y Néstor Pitrola, dirigentes del Partido Obrero, juraron este miércoles 3 de diciembre como diputados nacionales en la sesión preparatoria de la Cámara Baja, marcando desde el primer minuto una línea de intransigencia opositora al gobierno de Javier Milei y al Fondo Monetario Internacional. La bancada del FITU completará sus cuatro escaños con Nicolás Del Caño y Myriam Bregman, configurando un bloque que se plantea como la voz rupturista dentro del arco legislativo.

Del Plá, docente y referente sindical, centró su juramento en la defensa de los derechos laborales, la educación pública y la lucha contra la persecución a los movimientos sociales. “Impulsaremos la defensa incondicional de los derechos de los trabajadores, frente a las reformas reaccionarias que el gobierno de Milei y el FMI pretende imponer al pueblo argentino”, declaró tras asumir, y adelantó que su acción se desplegará “en los sindicatos, en los lugares de estudio, en las calles y en el recinto”.

Pitrola, dirigente gráfico que ingresa por el sistema de rotación del frente en reemplazo de Christian Castillo, fue aún más contundente en su planteo ideológico. Juró “por la derrota de la reforma laboral y de todo el paquete antiobrero y represivo de Milei y el FMI”, y añadió consignas que trascienden la política doméstica: “Fuera Trump de Argentina y América Latina, por el gobierno de los trabajadores y por el fin del genocidio sionista y una Palestina Libre en un mundo socialista”.

El discurso de ambos diputados no solo confronta con el oficialismo, sino que también delimita una posición frente al resto de la oposición. Del Plá fue explícita al marcar distancia de los acuerdos parlamentarios: “El Frente de Izquierda no forma parte de la rosca que tuvo lugar en estos días en torno a la elección de autoridades de la cámara”, en referencia a la reelección de Martín Menem al frente de la Cámara de Diputados. Además, denunció que su jura fue censurada en la transmisión oficial y que fue atacada por el diputado Lemoine por pronunciarse contra “el genocidio hacia el pueblo palestino”, en alusión a la remera que llevaba puesta.

Pitrola, por su parte, enmarcó las iniciativas del Gobierno como una “reestructuración económica y social de características históricas contra los trabajadores” impulsada por el imperialismo estadounidense. En su mirada, el Presupuesto 2026, la reforma laboral, la modificación del Código Penal y la tributaria conforman un mismo paquete destinado a disciplinar a la clase trabajadora y favorecer a los grandes capitales.

Con su asunción, el FITU ratifica su estrategia de construir una oposición desde la izquierda clasista, que rechaza cualquier tipo de negociación con lo que considera “la agenda reaccionaria” y apuesta a la movilización callejera como principal herramienta de resistencia. Su presencia en el Congreso promete no sólo votos en contra, sino también una narrativa de confrontación radical que tensionará los debates y expondrá las fracturas al interior del campo popular respecto de los modos de hacer política frente al avance libertario.