• ARCE FRENÓ EL GOLPE EN BOLIVIA: ZÚÑIGA DETENIDO Y LOS MILITARES SE RETIRAN

    Publicado: 29/06/2024

    El presidente Luis Arce, respaldado por una multitud, logra aislar a los golpistas. El general Juan José Zúñiga fue detenido. La interna con Evo Morales sigue latente.



    El intento de golpe del Ejército boliviano fracasó y Luis Arce se mantiene en el poder, más fortalecido que nunca. En un acto de valentía y decisión política, el Presidente boliviano se presentó en Plaza Murillo y habló en el balcón presidencial, demostrando su control sobre la situación.


    Arce actuó con rapidez, enfrentando al general golpista Zúñiga y nombrando de inmediato a un nuevo jefe del Ejército. En su discurso de asunción, el nuevo líder militar ordenó: "Todo el personal movilizado en las calles debe retornar a sus unidades".


    El presidente boliviano enfatizó que "haremos respetar la democracia ganada con el voto del pueblo boliviano en las urnas. Saludamos al pueblo boliviano que, anoticiado de estos acontecimientos, está rodeando la Plaza Murillo, y a los organismos internacionales que han reprochado estos actos, así como a los países amigos que se han pronunciado en favor de la democracia".


    Las fuerzas rebeldes se retiraron, y la Fiscalía General del Estado boliviano anunció la apertura de una investigación penal contra el ex jefe militar Juan José Zúñiga, quien fue detenido por la policía y declaró: "El presidente me pidió hacer algo para levantar su popularidad".


    Arce obtuvo un amplio apoyo internacional de gobiernos de la región, algunos países europeos y la OEA. También recibió respaldo de ex presidentes del país y líderes opositores. Sin embargo, la derrota de este nuevo golpe no logró unir a las dos facciones del Movimiento Al Socialismo (MAS), que mantienen una disputa interna desde hace al menos tres años. "Todo terminó con la posesión de un nuevo alto mando militar. Zúñiga, el comandante del Ejército sublevado que sitió el Palacio Quemado, debió ser destituido ayer. No habríamos tenido este tremendo susto!", cuestionaron desde el sector del evismo.


    Una fuente cercana al ex presidente dijo: "Venimos denunciando hace días la pasividad del gobierno frente a Zúñiga después de que, como Comandante del Ejército, amenazó a Evo Morales. Necesitamos explicaciones de lo que sucedió hoy, pero sobre todo, necesitamos justicia y a Zúñiga en la cárcel".


    Desde el sector de Arce, una funcionaria del gobierno respondió: "No es tan fácil destituir a un general de ejército. Eso debería saber el mismo Evo Morales y su gente. Antes de destituir, que sufrió un golpe de Estado, ni siquiera era del Ejército, era de la policía, no tuvo tiempo de reaccionar". Añadió que "gracias a la fortaleza de nuestro presidente Lucho, que no salió corriendo, dio la cara, se enfrentó. Estamos en la historia de un presidente fuerte que derrotó un intento de golpe de Estado", en clara referencia a la salida de Evo del país durante el golpe de Estado de 2019.


    Los debates internos del MAS se intensificaron en los grupos de Whatsapp, con seguidores de Evo insistiendo en la idea del autogolpe, mientras que otros remarcaron el "coraje" del presidente para derrotar el intento de golpe. El Grupo de Puebla, que agrupa a ex presidentes y líderes de centroizquierda y ha intentado mediar en la interna del MAS, también fue blanco de críticas. La Cancillería de Bolivia los acusó de sugerir que Arce había gestado un autogolpe y de construir una narrativa para acortar su mandato.


    Con los puentes prácticamente detonados, las dos facciones del MAS profundizan la pelea por la candidatura del próximo año, con acusaciones cruzadas y el partido de gobierno al borde de la ruptura.


    Frente a este escenario, gran parte del pueblo boliviano espera que la justicia y los jueces estén a la altura de las circunstancias, garantizando que los responsables del intento de golpe sean debidamente juzgados y que la democracia prevalezca.